Por Humberto Frontado
A mediados de los 90,
después de un largo trajinar en la búsqueda para concretar un estilo de su arte
logró en el surrealismo definirse. Apareció por arte de magia un escenario
circunscrito en la naturaleza animal, sobre todo en la de los reptiles, con sus
características comunes en la amplia gama de texturas y colores, centradas en
diversos ocres de verdes y marrones de claros a oscuros; envolventes garras, simétricos
contornos en escamas y pliegues. En ese contexto inicial se concentró particularmente
en el camaleón con su característica destacable de ocultamiento, aprovechando
sus colores naturales para alimentarse o para aparearse. Este tímido reptil escamoso
fue el que dió inicio a esa idea que estaba buscando.
Más tarde se le unió a esa
idea otro animal que también tiene sus destaques en el mundo mimético, se trata
del asombroso pulpo. Sus particularidades en cuanto a su adaptable conducta
cambiando colores cual semáforo ante cualquier desafío en su ambiente. Dos
animales con ambientes de vida disímiles, uno en la tierra vegetal y el otro en
el mar, ambiente coralino; sin embargo, ambos con conductas mimetizantes con
sus variantes, en momentos de enfrentarse a amenazas, cotejo y alimentación.
Todavía faltaba un
acompañante a este dúo animal. Más tarde se le incorporó otro espécimen menos mimético,
pero más agresivo. Llegó el momento donde hace aparición el hombre con su
estrafalaria y desarrollada mente, que por cierto no está tan distante de las
de sus colegas miméticos. Recordemos que éste último integrante igual se
aprovecha de su tenue mimetismo para ser aceptado en su ambiente, igual lo
emplea para conseguir sus objetivos, jerarquías, pareja y otras cosas que
resultan banales para sus símiles miméticos.
En fin, el pensamiento del
hombre queda reflejado de lleno en un hábitat compuesto por el resplandeciente
sol que nutre de vida y colores el ambiente marino y su ribereña vegetación.
Estos elementos dan cobijo a estos tres extraños y opuestos personajes que
buscan integrarse con ansiado ímpetu, pero solo llegan a rozarse en sus
pensamientos. Con sus maleables adaptaciones logran placenteros encuentros místicos
llenos de ardiente sol y salobre agua.
El mar con sus olas en afilados
garfios acaricia sutil al pulpo que ha emergido de su rocosa cueva al insólito encuentro;
flota y revolotea bordeando cosas que imita en su colorido y textura. El hombre
con sus sentimientos a flor de piel, transpira también emociones similares en
su propio ámbito. El tímido verde miedo se asoma entre la húmeda vegetación y
lentamente se deja ver, demostrando que la realidad y lo mágico pueden viajar
agarrados de la mano solo durante un trecho, más tarde o más temprano, si por
un momento anhelamos la realidad se difuminará instantánea nuestra magia en
todos los sentidos.
El pulpo demuestra su
peculiar facilidad de adaptarse al medio, su piel va demostrando eventos reales
e imaginarios sin menoscabo de la exageración, no hay miedo que demostrar ni
ocultar. Es un daguerrotipo marino de eterna información guardada, que aflora
al máximo exponiéndose al silente inconsciente. El hombre menos demostrativo
reconoce sus limitaciones y aunque quisiera no logra descifrar los mensajes
persistentes que su oculta sombra le mana, eso es trascendental para maximizar
su disfraz.
El sol es energía que insufla ganas de vivir y crear, el sereno mar apacigua y logra equilibrar nuestra carga emocional, y la verde paz de la vegetación direcciona y aclara la visualización del objetivo humano. En aquel equilibrado escenario de mimetismo psicológico los tres adaptables animales estuvieron un buen rato haciendo demostraciones y vanagloriándose de sus inimaginables dotes. El camaleón en un acto mágico fue apareciendo parsimonioso, difuminando y apartándose de los intensos morados de una orquídea que lo arropaba sutilmente y se dirigió al pusilánime humano recriminándolo.
- Es una lástima que hayas perdido buena parte de tu capacidad mimética. Todavía quedan vestigios que puedes recuperar, si te decides y te apartas de los objetivos mentales que te atan. Nosotros que te conocemos desde hace mucho sabemos que todo tu cuerpo aún es capaz de nutrirse de la fuente inagotable de tu inconsciente y emitir imperceptibles cambios de adaptabilidad en tu medio.
Venezuela, Cabimas, 20-11-2020
Maravillosa la capacidad que tenemos de camuflajearnos y adaptarnos!
ResponderEliminarbuenisimo!
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